Redacción: José Luis Camacho Malo
Me ha hecho ilusión que aceptara acercarse por esta tribuna pública José Manuel Fernández Cáceres, quien nació en el año 1955 en la localidad de Trigueros, casado, padre de dos hijos, José Manuel y Ismael y tres nietos. Con formación administrativa y gerencial que lo llevó a trabajar muy joven en labores administrativas. Tras el obligado cumplimiento con el Servicio Militar, paralelamente al trabajo administrativo en empresas del Polo Industrial, creó la S.A. Huelva Gabinete de Empresas para dar servicio administrativo, contable y seguros. Paralelamente en 1981 puso en marcha un ambicioso proyecto empresarial en Trigueros con la apertura de la Discoteca Reflejos, puntera en la época por el espacio y aforo (400 metros de espacio cubierto, 400 metros patio de verano), su creatividad y originales propuestas semanales para los jóvenes de la época, su buen equipo personal, trato cordial y a la vez exigente respecto al comportamiento de los usuarios le dio la fama de seguridad y como consecuencia garantizaba el disfrute de las personas de orden que la frecuentaba.
En 1987, tras un corto periodo como Inspector Comercial de Banco Vitalicio de España se hizo cargo, como Director Gerente para crear una estructura provincial en el territorio onubense que se consolidó en el tiempo alcanzando una posición privilegiada en el sector. Actualmente, libre de cargas, dedicado a colaborar en el proyecto de sus hijos, disfrutar con sus hobby, y paseos por Trigueros, El Portil o Pinares de Valverde. Siempre dispuesto.

José Manuel es de esas personas entrañables que te encuentras en la vida, muy sociable, cordial, buen conversador, disfrutón, optimista, con iniciativas, servicial, solidario, con don de gentes, buen amigo, o lo que es lo mismo, muy buena gente.Veo a nuestro invitado de hoy a esta serie de entrevistas con ganas de hablar por lo que no espero más tiempo para empezar con la batería de preguntas. Este es el resultado:
P. – ¿Qué opinión tienes de la situación que estamos viviendo?
R. – Sin duda, estamos atravesando una situación sin precedentes para la que nadie estaba realmente preparado, pero una que nos ha dado lecciones a todos. Situación, que por ser extraordinaria, debería servir para romper con estructuras tradicionales y adaptarse rápidamente a los nuevos cambios. Esta pandemia ha trastocado todo a nuestro alrededor pero al mismo tiempo sacado lo mejor de la sociedad: disciplina, resistencia y solidaridad. Creo que debemos aprender de todos los retos que nos pone la vida y éste es uno al que nos enfrentamos todos. Ojalá no perdamos la ocasión y saquemos conclusiones positivas de ésta situación en nuestro beneficio y para el resto dela sociedad.

P. – ¿Cómo crees que cambiará la vida después de la pandemia y sobre todo en el mundo de los seguros?
R. – En línea general la pandemia ha acelerado el ritmo de digitalización y quizás ya nunca volvamos a usar en la misma proporción el dinero físico en nuestras compras, veremos cómo se incrementa el comercio electrónico, se incrementará el teletrabajo, crecerá de manera exponencial las plataformas de comida a domicilio, crecerá la telemedicina y la tendencia será disponer de viviendas con espacios amplios y luminosidad y si es posible con jardín. Concluyendo, si todo indica distanciamiento, ya podríamos, con responsabilidad no dejar de disfrutar de nuestras reuniones de costumbre en esta alegre y luminosa Huelva que tenemos la suerte de poder disfrutar. Las restricciones, el miedo a los espacios cerrados nos pueden seguir aletargando, pero debemos volver con cautela y prudencia. Sobre todo, con el optimismo absolutamente necesario para seguir disfrutando, con nuestros encuentros familiares y amigos. La clave del éxito, por tanto, está en la adaptación a los cambios respetando, con responsabilidad, las “benditas” costumbres que en gran medida da sentido a nuestras vidas.
Respecto al seguro observo que el incremento de la percepción de los riesgos, es ahora mayor que antes de la extensión de la pandemia del coronavirus. Probablemente, la seguridad se convierta en un valor esencia. El incremento de la incertidumbre debería marcar el nuevo rumbo del sector asegurador que sin duda se estarán preparando con productos para las nuevas necesidades de sus asegurados. Pocas veces la sociedad en su conjunto ha estado tan preocupada por la salud como ahora, ni tuvieron la ocasión tan clara de verse afectado por la pérdida económicas debido a la cancelación de eventos. Hasta ahora, quizá en un seguro era lo último en lo que pensaban unos novios al poner fecha a su boda, pero ahora, serán muchas las parejas que decidan contratar este tipo de seguros. Se potenciará la contratación de seguros para la cancelación de viajes y la atención médica en viajes serán algunas de la imprescindibles, ampliados con coberturas específicas en caso de contagio de covid, etc. También presiento que se generalizarán los seguros de alquiler con coberturas de mensualidades impagadas para esos propietarios que complementan sus ingresos con estas rentas que podrían verse reducidas en esta pandemia y u otra causa mayor. Como observarás el gusanillo me puede y sigo viendo nuevas opciones.

P. – ¿Has pasado miedo en algún momento?
R. – Por supuesto, he pasado mucho miedo, a veces por riesgo físico en situaciones estresantes y peligrosas y con una grave enfermedad que pretendió acabar con mi vida. Durante la pandemia no, quizás porque tuve la suerte de pasarla en mi casa de Los Pinos de Valverde, donde cada día, pude pasear por aquel agradable entorno, zona con menos limitaciones y complementarlo con una afición que me apasiona. Me entusiasmé con una colección de lienzos que tenía en mente pintar con acrílico. Como sabes, somos seguidores de nuestro querido David de Miranda, el torero de Trigueros, que he tratado desde niño y al que le tengo un gran aprecio como buena persona que lo es y gran respeto como profesional que también lo es. Era el momento, tenía tiempo y buena disposición para conseguir mi propósito, que por cierto, con un magnífico resultado, sobre todo para mí. Cada mañana daba gracias por ser tan afortunado. Lamentaba con profundo dolor el daño y sufrimiento de tantas personas (profesionales y afectados) directa e indirectamente por covid, mientras yo creaba mis obras pictóricas alternándolas con los trabajos de madera que hoy adornan mi entorno.
P. – ¿Qué proyectos tienes para el futuro y que haces ahora?
R. – Durante años he acompañado a José Manuel mi hijo mayor, odontólogo de profesión con clínica dental en Trigueros. Tras mi retirada del sector asegurador como Director Provincial del Grupo Vitalicio, hoy Generali, creí que mi experiencia y disponibilidad podría servirle de ayuda durante esa primera etapa. Afortunadamente, ahora con la ayuda gerencial de mi otro hijo se ha consolidado el proyecto iniciado en el año 2005 con la creación de Almaclinic, Un nuevo concepto que combina la odontología de vanguardia con la estética y otras ramas de la salud. El equipo humano (odontólogos, higienistas, médico, técnicos especialista en medicina estética y auxiliares me transmiten la seguridad y tranquilidad necesaria para disfrutar, exclusivamente, del ahora.
Para encontrar ese ahora tan deseado, he leído, he buscado durante mucho tiempo, he escuchado muchos mensajes, experiencia traumáticas con resultados prodigiosos, pero me quedaría con el que considero pueda coincidir mejor con mi propósito y guía. Ric Elias pasajero en el vuelo 1549, el avión que hizo un aterrizaje forzoso en el río Hudson en Nueva York en enero de 2009 cuenta que aquel día aprendió tres cosas. Aprendió que todo cambia en un instante. Tenemos esta lista de cosas para hacer antes de morir, estas cosas que queremos hacer en vida, y pensó en toda la gente a las que quería decirles que las quería y no lo hizo, todos los errores que quería reparar, todas las experiencias que había querido tener y nunca tuvo. Ya no quería aplazar nada en la vida.

La segunda cosa que aprendió ese día, y lamentó, era el tiempo que desperdició en cosas que no importaban con gente que sí importaba. Pensó en relación con su familia, con sus amigos, con la gente. Y después meditó sobre eso y decidió eliminar la energía negativa de su vida. Ya no trato de tener razón. Eligió ser feliz.

Lo tercero que aprendió, mientras su reloj mental iba descontando, 15, 14, 13 y veía el agua aproximarse. Y mientras bajaban tuvo la sensación de que morir no da miedo. Es casi como que hemos estado preparándonos para ello toda la vida.
Como a Ric se me concedió el milagro de no morir aquel día. Y se me concedió otro regalo, que fue la posibilidad de mirar al futuro, y volver y vivir de otra forma. Ser un gran padre y ver crecer a mis hijos y mis nietos. Disfrutar de la amistad sana de mis buenos amigos. Tratar de eliminar la energía negativa de la vida y eliminar los agentes tóxicos que nos acompañan. Dar todo, sin pedir nada a cambio. En definitiva y concretando José Luis para el ahora elijo: Ser feliz.
P. – ¿Qué significa para ti Huelva y Trigueros?
R. – Significa todo, Trigueros es el pueblo de mis bisabuelos, abuelos, padres, el pueblo que me vio nacer, donde he crecido junto a mi hermano Pablo (el padre de tu colega María Fernández) y he visto crecer a mis hijos y del que no me he alejado nunca, donde he pasado cada noche de mi vida, salvo aquellas en las que, por vacaciones u otros puntuales motivos, lo impidió, donde me sigo reuniendo con los mismos amigos de mi niñez, donde mis hijos se situaron profesionalmente y desarrollan su trabajo, donde vivo y en el que quiero seguir viviendo. Trigueros, pueblo de tierra llana, donde pacen las reses bravas de las ganaderías de hijos de Celestino Cuadri y de Manuel Ángel Millares. Agricultora, tierra de pan apreciada desde tiempos remotos. Trigueros donde el hombre fue ocupando espacios de forma ininterrumpida, dejando diversa huella entre las que destaca el Dolmen de Soto (2500 y 3000 años antes de Cristo, Pilar de la Media Legua de la época de dominación romana (siglo II d. C). Donde los musulmanes en el siglo XII construyeron una fortaleza almohade y que sobre ella se construye nuestra iglesia de San Antonio. Fortaleza construida para proteger el valle del Guadalquivir de las incursiones portuguesas) etc, etc, no quiero cansarte con mi explicación. Te invito a la oficina de turismo local donde te informará sobre nuestra historia y monumentos: Dolmen de Soto, Iglesia de San Antón, Convento del Carmen, Colegio de los Jesuitas, Ermita de la Santa Misericordia, Casa Museo Juan Vides.
No quiero pasar por alto nuestra gastronomía, la “tosta” elaborado con pan redondo de Trigueros, los chorizos y carnes a la brasa que podrás encontrar en las bodegas y mesones, las famosas calderetas de cordero, que tuviste la suerte de degustar, cocinada por el amigo Millares en la reunión gastronómica-cultural de Amigos del Mache celebrada antes de la pandemia en Casa Alejandro.
En repostería también somos punteros, Se elaboran excelentes y tradicionales dulces de almendras; perrunillas, hornazos, tortas, etc. También de ello tienes buena muestra gracias a La Pesetera, repostera local que nos lo facilita en las reuniones citadas.Huelva para mí significa clima agradable, luz del amanecer y puesta de Sol en los paseos por la playa de El Portil, un plato de choco con habas o papas ygambas blancas de nuestra costa, el olor a tierra mojada en los paseos otoñales por el Pinal del Estado de Valverde del Camino, el sabor único de la tortilla de gurumelos, el paseo por uno de los muchos senderos y degustación de un plato de huevos fritos con patatas y jamón en un restaurante de nuestra sierra.Es la que cada vez que he regresado de algún viaje, incluso de otros continentes, me reconfortaba el comprobar que teníamos la suerte de vivir en una tierra inigualable.

P. – ¿Qué necesita Huelva para despegar?
R. – Si, como parece, tiene de todo, tendríamos que preguntarnos quien impide su despegue. Creo que es un problema de todos, también de los ciudadanos con su voto, pero de forma especial de quienes deciden. Es lamentable ver como se deterioran nuestras playas y nadie hace nada. Muchos y llamativos titulares y fotos de los políticos en las playas onubenses afectadas en la época veraniega y hasta el próximo año que, los que vivimos en la zona, con vergüenza, seguiremos comprobando que los visitantes de otras regiones siguen, año tras años, manifestando su incredulidad antes la dejadez de este envidiable entorno. Quiero creer que no son problemas de fácil solución pero los años me hacen suponer, que en gran medida, no se quiere por las razones que ellos sabrán. De la línea de Ave permíteme no opinar. Como te dije anteriormente, mi Ahora está en alejarme de todo lo tóxico que perjudique mi felicidad.
P. – ¿Qué recuerdos, buenos y no tanto de tu etapa como profesional del seguro?
R. – Fueron los mejores años vividos, En el año 1987 me hice cargo de la delegación de Banco Vitalicio en Huelva y la proyección fue vertiginosa. Coincidió con un periodo de descentralización de aquella histórica compañía aseguradora propiedad del Banco Central en un porcentaje mayoritario. Compartíamos al Sr. Escame como presidente de ambas entidades y pasamos de trabajar casi exclusivamente con los clientes directo de la entidad bancaria, dedicados en especial a grandes operaciones (muchas de ellas de flotas pesqueras) a la expansión en el amplio sentido de la palabra. Para ello Escame contrató un equipo joven, dinámico y creativo comandado por el director general, José Luis Pérez Torre. Diseñaron un plan que contemplaba la fusión de Nacional Hispánica y Banco Vitalicio de España en Grupo Vitalicio, cambiaron la imagen con una más moderna, apostaron por la adquisición de oficinas por todo el territorio español.

La suma de todo ello hizo que durante años fuésemos de las primeras aseguradoras nacional y provincial. En Huelva pasamos de una pequeña oficina en el edificio del Punto con un jefe de oficina y una empleada, a la segunda ubicada en primera planta de calle Berdigón con Alfonso XII y posterior y definitivo traslado a La Palmera, planta baja de cuatrocientos metros cuadrados (actual oficina de Generali) que llegó a ocupar una plantilla de administrativos, inspectores, técnicos en siniestros y administrativo muy importante.En aquella etapa de descentralización, mis competencias eran totales, tenía mucha autonomía y solo de mi capacidad como gestor y los resultados dependía mi continuidad como responsable provincial. Tuve suerte, supe aprovechar el apoyo de la D.G. Contábamos con los servicios de un importante y prestigioso gabinete jurídico, médicos forenses. La unión de todas esas fuerzas, provocó una explosiva expansión por todo el territorio provincial con la creación de una red de oficinas, muchas de ellas propias, y un equipo humano de colaboradores amigos, de guerreros en la batalla que difícilmente perdían.Durante años fuimos de las primeras sucursales provinciales del Grupo y nuestros agentes locales se medían con los mejores de la organización. De hecho, recuerdo con emoción, la convención nacional en el Palacio de Cristal de Madrid, conseguir el premio al mejor director de España, mención creada aquel mismo año, por primera vez, para motivar a los responsables provinciales. Lo vivido no tiene nada que ver con lo que hoy ocurre en el sector.
La peor etapa, sin dudas, fue cuando se volvió a centralizar lo descentralizado y como consecuencia se descompuso un proyecto basado en la cercanía, en la amistad, en el del apoyo mutuo de todos los que formábamos parte del equipoprovincial. Se impuso un único modelo de gestión para todo el territorio nacional, aunque ello perjudicase a algunas provincias, como a la nuestra le ocurrió. No se tuvo en cuenta la singularidad de cada provincia, justo lo opuesto a mi sistema, basado en la personalización, siempre entendiendo las necesidades de nuestros colaboradores, que al fin y al cabo mantenían nuestra estructura. Desde entonces se dejó de gestionar, las personas pasaron a ser un número dentro de la organización, recibir órdenes y a cumplirlas caiga quien caiga y la cuenta de resultado provincial resultó ser la consecuencia de una mala o buena gestión de terceros que no podíamos controlar desde la sucursal. Una difícil situación para los que no sabíamos exigir sin antes enseñar, Dar antes de pedir resultados y gestionar con argumentos razonables, sin la imposición que antes y creo sigue exigiéndose en la actualidad
.P. – ¿Intentan algunos clientes meter trolas para cobrar y los seguros son muy tiquismiquis?
R. – La picaresca ha existido existe y existirá. No es cierto que las aseguradoras sean tiquismiquis, lo realmente cierto es que las pólizas (contratos) no se explicaban bien y muchas veces se creaban conflictos con los daños no incluidos en el contrato subscrito por las parte El ¡¡me dijeron estaba cubierto¡¡ para nosotros era la expresión habitual de los asegurados que veían mermada o rechazada sus indemnización. En mi etapa, en la medida de lo posible, cuando era patente la buena fe de nuestro asegurado se indemnizaba aplicando otros criterios independientemente de se cumpliese o no lo pactado en contrato. Cuando se descubría que existía mala fe, tratábamos de defender los intereses de la aseguradora y de los asegurados. Al fin y al cabo, la picaresca de unos perjudican a los que actúan correctamente. Las empresas se mantienen con beneficios (diferencia entre las primas cobradas y los siniestros indemnizados).Si se entra o se aproxima la perdida suben el producto y solo sale beneficiado, si logra su propósito, el pícaro. Es todo tan complejo que habría que dedicar otra entrevista completa.

P. – ¿Estás presidiendo un grupo de opinión de Trigueros?
R. – Presi me llaman, quizás por ser el miembro que más tiempo tengo para organizar estos eventos, luego de presidente nada. No somos, ni pretendemos constituir una asociación. En su momento establecí unas normas mínimas, de obligado cumplimiento que hasta ahora, parece ser suficiente y así seguiremos. Este grupo nació tras el fallecimiento de José Antonio Garrido “El Mache”, un gran amigo, en mi caso familiar, que acostumbraba a organizar encuentros en un salón de su propiedad, a la salida de Trigueros, donde compartíamos una suculenta comida aderezada con unos cantes y charlas de toros que le apasionaba. Tras un periodo de inactividad, debido a su temprano fallecimiento se decidió retomar aquellas reuniones en los que compartíamos un rato de amistad. Decidimos reactivar el grupo porque lo necesitábamos como acto social y de paso podíamos lograr mantener vivo el recuerdo del Mache. Había que darle un sentido lúdico, por lo que, sin perder la sencillez y cordialidad que caracterizo aquellos encuentros se incorporó al programa una actividad cultural que nos ha permitido ir aprendiendo de todos y cada uno de los ponentes que durante estos seis años tuvimos la suerte de recibir. Nos visitaron y aprendimos con charlas de: Jueces, toreros, ganaderos, empresarios taurinos y de cuadras de caballos toreros, Teórica-práctica de flamenco. Actualidad política, deportiva. Historia local provincial y nacional, Salud general, alimenticia y otras que en este momento no recuerdo. Salimos de visitas a ganaderías de toros bravos, asistimos a tentaderos, realizamos visitas culturales locales y en la provincia, visitas a recintos militares, etc. Objetivo cubierto y quizás sea importante destacar que a éste grupo, que comenzó en su origen con tres personas, en la actualidad está compuesto por 32 personas de Huelva, Trigueros, Aljaraque, Valverde, diversos entre ellos pero homogéneo trato y comportamiento en nuestros encuentros.
P. – ¿Qué recuerdos tienes de tu niñez y que soñabas ser de mayor?
R. – Recuerdo un niño adelantado a su edad, inquieto, inseguro, preocupado por su futuro laboral que con corta edad hacia lo posible por ayudar a mis padres en todo, incluso en lo que no parecía normal en un chaval de corta edad. Me divertía como cualquier niño pero en mi mente rondaba la preocupación por un incierto futuro laboral pensamiento que ahora parece impropio para un niño.
P. – ¿Quiénes son o han sido tus referentes personales o profesionales?
R. – No he tenido ningún referente, aunque he sentido gran admiración por varios emprendedores. Quizás destacaría a Amancio Ortega por venir de una familia humilde, Ser tan perseverante, disciplinado. Arrancar como repartidor de una camisería desde donde inició un ambicioso proyecto hasta llegar al imperio que posee en la actualidad, por ser visionario en su época tanto con la idea productiva, como en el desarrollo de su original proyecto de expansión territorial utilizando locales de alquiler y reinvirtiendo constantemente. Sobre todo por lahabilidad para crear un gran equipo de empleados en quienes delegaba responsabilidades y con quien llegó a conseguir en poco tiempo y poco capital importante crecimiento mundial y beneficios.
Con parte de ese beneficio creo La Fundación Amancio Ortega institución sin ánimo de lucro fruto de su experiencia y su deseo de contribuir a una sociedad mejor. Creo un programa de becas para que todas las personas tengan las mismas oportunidades, Centro residenciales para mayores, equipos de novedosas técnicas para destruir las células tumorales, y otras muchas donaciones millonarias a sanidad para adquisición de material para combatir el covid, etc. Creo que no se le puede pedir más aunque, como es lo habitual, tenga detractores que critiquen su labor.
P. – ¿Se han cumplido los objetivos de vida que te marcaste?
R. – Totalmente. Diría muy por encima de lo que pude haber soñado. Me considero una persona muy afortunada en todos los aspectos. José Manuel, que quieres que te diga. Ha sido toda una gozada este ratito que hemos echado y decirte que el día que estuve con ustedes en los encuentros de recuerdo a Mache, lo pasé simplemente fenomenal. Me encanta verte feliz, tan optimista y tan vital. Y no dejes la pintura que lo haces muy bien. Un abrazo grande amigo
Comparte esto:
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)