Francisco Javier López Domínguez, Miembro de la Junta de Gobierno y uno de los capataces del Cristo Yacente, cuenta a triguerosnoticias.es cómo afrontan desde la Hermandad del Santo Entierro este Viernes Santo en Trigueros.
«Con un sabor agridulce. Mentiríamos si dijéramos que lo llevamos bien, puesto que a todos los que amamos la Semana Santa nos gustaría poder vivirla en las calles con todos los titulares de cada hermandad y cada una procesionando en sus días correspondientes. Ese olor a incienso, trabajo bajo los pasos, sonido de una banda…Pero bueno, la fe siempre se lleva por dentro y entendemos que esta batalla tenemos que vencerla entre todos juntos.
Este año, al menos, tenemos la posibilidad dentro de los protocolos establecidos, de hacer llegar a todos los devotos de la hermandad un Viernes Santo diferente. Acercándoles a nuestros tres titulares para que se les pueda venerar y hacer un rezo hacia ellos. En horario de visita por la mañana y tarde (10- 14 h.) y (17-19 h.), finalizando el viernes con el rezo de un Vía Crucis», explica.
Purificación Pérez, Tesorera de la Hermandad, cuenta que la hermandad se fundó el domingo 3 de Agosto de 1558 en la parroquia del Carmen.
«La recuerdo con mucho cariño y nervios porque era la primera vez que me vestía con el hábito de nazareno. Recorría las calles de la villa acompañando nada más y nada menos que al mismísimo dios hecho hombre y eso me impresionó mucho. Recuerdo que llevaba los bolsillos llenos de caramelos para dárselo a los niños y que no tuviesen miedo de acercarse, y eso, me gustó. Desde entonces y hasta hoy día sigo trabajando por la Hermandad y por la semana santa de mi pueblo».
A día de hoy la Antigua y Fervorosa Hermandad y Cofradía de nazarenos del Santo Entierro de cristo, Ntra. señora de la Soledad y Santísimo Cristo del Carmelo, cuenta con 352 hermanos. «Con la ayuda de ellos, seguimos vivos. Las hermandades necesitan hermanos para poder crecer y que nuestra tradición cofradiera no se pierda. Tampoco nuestra historia, ya que tenemos mucha», aseguran.
Y, aunque la tradición sigue permaneciendo viva, este año desde la hermandad han echado en falta muchos momentos especiales, a causa de la pandemia.
«Son muchos momentos en los que el mundo cofrade une a tantas personas trabajando por un mismo amor hacia la Semana Santa… Ratos de risa, trabajo, charlas en cada ensayo, comidas etc. Son momentos en los que, a parte de hacer algo que nos apasiona, olvidamos por un momento nuestra rutina diaria de trabajo y desconectamos dedicando un rato a este mundo cofrade».
Este año ha sido duro para la hermandad, pero, al mismo tiempo, todos sus miembros han permanecido unidos. «Lo más importante era que todos tuviésemos salud y fuésemos caminando día tras día, aunque lo más complicado ha sido tener que suspender actos y eventos que normalmente organizamos a lo largo del año».
A pesar de todo, de la pandemia sacan el lado positivo: «que la fe nunca se pierde, que por muchos obstáculos que se presenten en la vida, siempre encontraremos algo para poder estar unidos y seguir luchando de la mano todos juntos».
Este año, además, la hermandad, consciente de que no iba a tener gastos debido a la situación, decidió donar a la Parroquia 500 euros y otros 500 euros a Cáritas Parroquial. También se donaron 312 euros a la Casa de los Milagros.
Con todo, sí han podido celebrar (respetando las medidas Covid) con «normalidad» los cultos previos a la Semana Santa:
«Este año, gracias a Dios, hemos podido celebrar los cultos a nuestros sagrados titulares. Estos días de cultos nos han dado esperanza para poder celebrar una Semana Santa diferente, otra vez sin procesiones, pero con la fe de que Jesús y su madre María no nos abandonan. Siempre están en el convento con los brazos abiertos para darnos la bienvenida a todos sus hijos. Allí de nuevo estarán el día 2 de abril en horario de mañana y tarde».
En este año convulso, la hermandad del Viernes Santo en Trigueros, pone en valor «el compromiso de todos por seguir manteniendo viva la tradición de este día a pesar de las dificultades. Que en cada hogar de todos los amantes del mundo cofrade, jamás muere la Semana Santa y que, como bien decimos, la Semana Santa son los 365 días del año. El gesto de muchos hermanos por donar voluntariamente el recibo de hermandad, a pesar de la suspensión del mismo y querer seguir trabajando para mantener vivo todo lo que engloba a este mundo es algo que nos llena de alegría.
Queremos mandar un fuerte abrazo de parte de todos y cada uno de los miembros que componen esta hermandad. Me gustaría decirles que si algún día llegan a caer, hagan como el sol, que cada tarde cae pero cada mañana se levanta con más resplandor. Que sean fuertes y que con la lucha de todos JUNTOS venceremos esta batalla poco a poco».
Así pues, animan a disfrutar de este día, a pesar de las restricciones.
«Hay que vivir el momento, el presente, y en este momento acorde a las circunstancias que vivimos tenemos que adaptarnos a lo que la vida nos permite tras esta pandemia. Por supuesto animar a que todos sigamos haciendo Semana Santa, NUESTRA SEMANA SANTA y que jamás se apague la fe en nuestros corazones para seguir creciendo en este mundo cofrade. A pesar de la complicada situación que atravesamos, volveremos sin duda con la unión de todos y más fuertes que nunca».
Comparte esto:
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)